Ahora Andalucía muestra su rechazo a la reapertura de la mina de Aznalcóllar y los vertidos al Guadalquivir
Las políticas andaluzas deben proteger el entorno medioambiental siendo sensibles con la biodiversidad como riqueza natural y vital de nuestra tierra. Los vertidos de metales pesados al Guadalquivir es una práctica desastrosa que debería impedirse a toda costa
Mañana se cumplirán 26 años de uno de los peores episodios medioambientales que han tenido lugar en Andalucía y toda Europa. La mina de la multinacional sueca Boliden en Aznalcóllar provocó un vertido incontrolado de lodos contaminantes que arrasaron con la población animal y vegetal que encontraron a su paso, poniendo en jaque al parque de Doñana y toda la cuenca del río Guadiamar.
En Andalucía parece que no aprendemos de nuestros errores y según denuncian las organizaciones ecologistas, las administraciones vuelven a vender a saldo la seguridad de nuestra tierra, su rico patrimonio medioambiental y su sostenibilidad.
La reapertura de la actividad minera sería un ataque frontal contra la dignidad, la memoria colectiva y la biodiversidad natural de nuestra tierra. Es inconcebible que la Junta de Andalucía se encuentre en estos momentos preparando las autorizaciones pertinentes para que la empresa Minera Los Frailes, participada en más de un 97% por un grupo mejicano famoso por protagonizar otros vertidos contaminantes, pueda continuar poniendo en jaque la sostenibilidad medioambiental de una zona andaluza tan deprimida, necesitada de evolución especio-temporal y condenada por años, lustros, décadas y siglos a recuperar de forma paciente la capacidad natural que atesora en potencia.
El proyecto de reapertura comprende una tubería de 30 km que partiendo del recinto minero de Aznalcóllar recorrerá los municipios de Sanlúcar La Mayor, Valencina, Olivares, Salteras y Santiponce, vertiendo al río Guadalquivir un total de 85.520 millones de litros de aguas contaminadas con metales pesados, durante 18 años y medio.
Desde Ahora Andalucía condenamos estas intenciones, ofrecemos todo nuestro apoyo a las organizaciones ecologistas que se encuentran oponiéndose frontalmente a esta situación y exigimos al presidente de la Junta de Andalucía que recapacite y de marcha atrás a los propósitos de su Gobierno.
El modelo andaluz no pasa por hacer peligrar nuestros recursos naturales, ni por poner en riesgo la salud de nuestras sociedades comarcales, ni pasa por el extractivismo económico de nuestros recursos a costa de todo. El modelo de desarrollo de la sociedad andaluza no puede pasar por darle la espalda a la sostenibilidad y a las políticas de integración e interrelación con el medio natural. Andalucía no debe seguir siendo la cenicienta a la que expolian mientras la ponen en peligro constante.
Desde Ahora Andalucía decimos alto y claro: No a la reapertura de la mina de Aznalcóllar y a los vertidos contaminantes en nuestros ríos. Moreno Bonilla y el PP vuelven a demostrar el cinismo político en el que se han instalado, dejando de lado los intereses de Andalucía y posicionándose junto a una multinacional mejicana que pretende seguir enriqueciéndose a costa de nuestros recursos y nuestra seguridad.